La huerta del Obispo ha pasado de acoger un par de eventos al año, a ser la referencia para muchas actividades sociales y musicales de nuestra ciudad.
Teniendo en cuenta que muchas viviendas están a escasos 100 metros del escenario, ya podemos imaginar lo que supone esto para el sufrido vecindario de Manigua, Plaza de Palacio y alrededores. En muchos casos el exceso de decibelios llega sin problema algún a calles muy alejadas de este recinto.
Hay que añadir algunos pequeños detalles, como es el hecho de que los ensayos comienzan a las diez de la mañana y continúan así hasta un par de horas antes del comienzo de la actividad, que se prologan hasta altas horas de la madrugada.
A esas horas, cuando el concierto acaba, no finaliza el sufrimiento del vecindario, comienza el trasiego de personas, con griterío y camino a micro botellones en nuestras calles, muchos de ellos exaltados por la propia música van cantando las canciones de su ídolo de turno, sin tener en cuenta que, a escasos metros de ellos, hay personas que tienen que descansar. Resulta curioso el poder de aguante de muchas de estas personas, que tras todo un día, tienen capacidad para seguir mostrando sus altas capacidades de canto y de voz tan cerca de nuestras viviendas; sin duda esto es un tema de orden público y sobre todo de educación y respeto social.
Obviamente a la par de estos micro botellones y conciertos a capela por nuestras calles, deben evacuar lo bebido, y evidentemente nuestras esquinas, nuestras puertas, nuestras fachadas, muchas de ellas englobadas en ese “Patrimonio de ciudad” parecen ser idóneas para las micciones abundantes y por supuesto sin discriminación por razones de raza, sexo o edad, igual que nuestras calles se convierten en las papeleras donde abandonar todo tipo de residuos.
Esta realidad que vivimos, nos lleva a dudar muy mucho que la ya famosa HUERTA DEL OBISPO, sea un lugar adecuado para celebrar ningún tipo de festival de música de cualquier clase, por lo que vamos a solicitar por todos los medios que en este lugar no se realicen más qué las representaciones que se venían realizando durante muchos años.
